lunes, 16 de diciembre de 2013

ENESSENZIA EMPRENDEDORA

La situación económica actual, no es uno de los mejores escenarios para emprender, se estan planteando retos difíciles de afrontar, tanto a nivel de pequeñas empresas, como a nivel individual, y eso conlleva la necesidad y la habilidad de saberse adaptar al presente. Ante ésta situación los emprendedores@s deben evolucionar y transformar, si cabe, su proyecto al momento actual, sin perder la visión de futuro, decidiéndose por cambiar estrategias, llegar a otros mercados, y sobre todo innovando, puesto que es la pieza clave, ya que la capacidad de adaptación de la competencia es la misma que podemos tener nosotros, y esto no nos proporcionará el éxito, sino más bien el esfuerzo de transformar lo que es normal en algo sorprendente, y para ello vamos a necesitar grandes dosis de creatividad.

Tod@s podemos ser creativos hasta límites insospechados, no es algo innato, sino que se puede practicar y se puede desarrollar mediante técnicas, y ejercicios para ese fin, personalmente doy mucha importancia a esta parte, puesto que les facilita a los emprendedor@s ampliar visión, para avanzarse a las posibles necesidades futuras del mercado, permitiendo desarrollar nuevas ideas con productos originalmente diferentes.

Si tuviera que nombrar que ingredientes principales son los que conforman un emprendedor me atrevería a decir los siguientes:

CREE en sí mism@ y en su proyecto.
SIENTE ILUSIÓN por su idea y PASIÓN por lo que hace.
SIENTE SUS VALORES y los refleja en su proyecto.
ESTA COMPROMETID@ consigo mism@, con las personas  y su entorno.
SIENTE CONFIANZA en sí mism@ y en su proyecto.
DESARROLLA LA CONSTANCIA de lucha y esfuerzo, la RESILIENCIA ante las dificultades y ADAPTACIÓN a los entornos cambiantes
POSEE UN ALTO GRADO DE VISIÓN, CAPACIDAD DE INNOVARSE, CREATIVIDAD, y DETERMINACIÓN, y una cierta dosis de RIESGO.

Mi experiencia como coach en emprendedor@s sociales, me han llevado a ser testimonio de la ilusión y la fuerza con la que muchas mujeres hacen tangible un sueño que permanecía latente en sus pensamientos y en sus corazones, dado que con su materialización, recuperan su independencia y estabilidad económica, y reorientan a su vez, su carrera profesional permitiéndoles posicionarse, a la vez que ejercen asimismo su vocación y talento para ser productivas en aquello que ellas sienten y se identifican.


Este momento actual también puede ser visto como una oportunidad, y de hecho las emprendedor@s sociales lo están viendo así, pues están tomando fuerza. Sienten la creciente necesidad de promover el cambio de paradigma y conciencia colectiva, para contribuir con sus proyectos a mejorar los problemas o paliar los efectos de lo que se ha dañado o se ha desatendido socialmente, como la degradación medioambiental, la desigualdad y carencias educativas, la  vejez, la economía y su injusta distribución, la desigualdad de sexo en los entornos laborales, y la pobreza que han generado los procesos de desarrollo y crecimiento económico, con la intención y la firmeza de contribuir con ellos a la eliminación o resolución de éstos.


Los emprendedor@s necesitan formación, asesoramiento económico-financiero para hacer posible su idea de negocio, ellos son el alma de su creación. Y todo y siendo el alma, nos olvidamos que en la fase de emprender el emprendedor tiene altibajos emocionales. 
Un soporte de Coaching, supone un reforzamiento de todos los mecanismos de defensa ante el desgaste emocional y el esfuerzo que implica mantener un grado óptimo de resiliencia, tolerancia a la ambigüedad y a la frustración. potenciando al máximo sus fortalezas, valores y emociones positivas, que aumentarán el motor de la motivación para la consecución de su objetivo.

Con el coaching van trabajando desde su propio autoconocimiento, a desarrollar técnicas, descubriendo herramientas que les ayudan a gestionar sus emociones, e incluso descubrir nuevas habilidades y potenciar aquellas que les facilitarán llevar a cabo su proyecto emprendedor con la solidez necesaria para garantizar su perdurabilidad en el futuro.

Puesto que somos futuro, en nosotros reside también el despertar, fomentar, desarrollar y potenciar en todos los ámbitos posibles, el espíritu y la esencia emprendedora, pues en ella está el motor de progreso y la innovación.



"Un proyecto emprendedor no tiene valor por sí mismo, lo que tiene valor es la persona que lo hace posible..."
                                                Maria José de Sanz